El Señor está cerca de los quebrantados de corazón
y salva a los abatidos de espíritu.
Salmo 34:18

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Una lesión por aplastamiento se produce cuando se ejerce una fuerza o presión excesivas sobre una parte del cuerpo. Físicamente, son difíciles de curar y muy dolorosas. Una lesión por aplastamiento espiritual es aún más dolorosa y difícil de curar porque nuestros espíritus sienten el dolor de forma más intensa, profunda y prolongada que nuestros cuerpos.

Cuando pasé por mi divorcio sorpresa hace 15 años, mi espíritu estuvo destrozado durante un par de años. Incluso teniendo en cuenta todas las muchas heridas físicas y espirituales que he experimentado, mi divorcio fue el período más doloroso de mi vida. Leía y rezaba el Salmo 34 todos los días. Dios era mi compañero constante, y me sostenía cerca.

Una de las maneras más asombrosas en que Dios me sanó del divorcio fue a través de mi voluntariado en el Willow Creek Care Center en South Barrington, convirtiendo mi soledad y dolor en un dulce tiempo con Él. Él me bendijo amorosamente mientras servía a otros en sus necesidades, dándome una historia y esperanza y alegría para compartir con otros, para animarlos mientras les ayudaba a conseguir comida.

La fantástica noticia es que Jesús vino no sólo a rescatarnos para la eternidad, sino también a mostrarnos cómo vivir una vida plena y llena de amor. Vino a darnos vida abundante aquí y ahora, no más tarde, después de atravesar el velo de la muerte.

Dios salva y sana a los que tenemos el espíritu abatido, tanto directamente como a través del servicio a los demás. Y servir a los demás en su necesidad con espíritu de amor es una de las mejores maneras de decirle a Dios: "Gracias, te quiero". 

Próximos pasos

• Lee el Salmo 34, deteniéndote a reflexionar en las distintas líneas a medida que lees el salmo. La vida es a menudo difícil, y las heridas aplastantes son frecuentes. Junto con el Salmo 27, es un salmo útil con el que hay que familiarizarse.
• Inscríbete para ayudar a empacar semillas en cualquiera de los campus de la iglesia Willow Creek. Incluso si actualmente no estás pasando por un momento oscuro o difícil, serás bendecido por servir a otros, tanto individuos como familias, que necesitan desesperadamente la esperanza de las semillas para obtener alimentos e incluso ingresos.
• Pide a Dios que tu camino diario se cruce con el de otra persona que necesite un toque de esperanza o de bondad que tú puedas compartir.