Sigan acordándose de los que están en la cárcel como si estuvieran con ellos en la cárcel, y de los que son maltratados como si ustedes mismos estuvieran sufriendo.
Hebreos 13:3

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Faltan exactamente seis semanas para Navidad. Así es. Cuarenta y dos días para el cumpleaños de Jesús. Cuarenta y dos días para encontrar los regalos perfectos para nuestros seres queridos. Cuarenta y dos días hasta que nos reunamos para celebrar el día en que Dios nos hizo el regalo definitivo. Un regalo de amor. Un regalo de alegría. Un regalo de esperanza.

Cuando estaba en el instituto, mi grupo de jóvenes compró regalos de Navidad para una familia necesitada con el dinero que recaudamos. Pudimos llevárselos a la familia una semana antes de Navidad y experimentar en persona la alegría en sus caras. Fue una gran bendición poder ver su reacción y saber que les habíamos proporcionado algunos de los artículos que esperaban para esas fiestas. Recuerdo el impacto que me causó que compartieran su historia con nosotros y ver la incertidumbre del futuro en sus ojos. En los últimos años, habían experimentado circunstancias que escapaban a su control y habían caído en la penuria económica. Saber que les habíamos dado algo de esperanza en una época incierta y dolorosa fue una lección de humildad.

La esperanza aparece donde fluye el dolor. Cuando sufrimos, la esperanza es esa luz al final del túnel que promete un futuro mejor. Sin esperanza, puede parecer casi imposible soportar nuestras circunstancias o creer que van a cambiar, o que podemos transformarnos y elevarnos por encima del dolor. Con esperanza, todo parece posible. Cuando Dios nos dio la esperanza en la forma de Jesús, puso fin a nuestros días sin esperanza y nos regaló para siempre un futuro mejor.

Durante más de diez Navidades, Willow ha estado entregando regalos llamados Paquetes de Esperanza a Prisiones y Centros Penitenciarios. En ese tiempo, más de 500,000 regalos han sido entregados a personas encarceladas y a aquellos impactados por su encarcelamiento. Estos paquetes representan el apoyo de nuestra iglesia a los presos que desarrollan relaciones con Jesucristo y les proporcionan la esperanza de una vida nueva, redimida y transformada más allá de los muros que actualmente los contienen. Para saber más sobre los Paquetes de Esperanza, haga clic aquí.

Próximos pasos

Únase a nosotros en persona en su sucursal local de Willow este domingo, 17 de noviembre, para ser parte de una oportunidad maravillosa y significativa para proporcionar esperanza a los encarcelados. Y, ora por los prisioneros que recibirán los Paquetes de Esperanza, para que sean bendecidos con corazones ablandados y encuentren esperanza en Jesús.