Es un túnel, no una puerta trampa

Dan Lovaglia, Pastor del Campamento Paradise | 16 de octubre de 2023

Cantad alabanzas al Señor, vosotros su pueblo fiel;
alabad su santo nombre.
Porque su cólera dura un momento
pero su favor dura toda la vida;
el llanto puede durar toda la noche
pero por la mañana viene la alegría.
Salmo 30:4-5


Tú y yo estamos invitados a seguir a Jesús en y a través de "lo difícil", sea lo que sea hoy y dure lo que dure. En última instancia, si estamos abiertos, el Espíritu Santo nos llevará a descubrir una forma mejor de navegar por esta aventura sin guión que llamamos vida con Dios. Cuando sientas que el peso del mundo se te viene encima, recuerda que es un túnel, no una trampilla.

El Salmo 30:4-5 es un bonito par de versículos para poner en una taza. Es decir, hasta que intentas leerlos día tras día entre lágrimas de tristeza, ira, confusión, miedo y un dolor desgarrador. Personalmente, preferiría tirar mi té por la habitación a que me dieran otra perogrullada. Pero sólo porque me sienta desesperanzado, mi realidad actual no hace que las promesas de Dios sean falsas, innecesarias o inoportunas.

El salmista implora al pueblo de Dios que, en cualquier circunstancia o condición, le honre con su voz y su vida. Y más allá de pronunciar el nombre del Señor, el pasaje llama a reconocer Su perfecto historial de redención. ¿Por qué? Porque cuando las dificultades, el sufrimiento o las consecuencias de nuestro pecado parecen que van a durar para siempre, Dios nos hace saber que son sólo un parpadeo en Su radar y que el final está a la vista. Cuando estamos convencidos de que la pérdida o el fracaso nunca terminarán, podemos atravesar la oscuridad de la noche porque la esperanza y la alegría ya están de nuestro lado.

No hay lugares comunes en el Salmo 30:4-5, sólo verdad. Aunque "las cosas difíciles" que tú y yo encontramos (o elegimos pecaminosamente) pueden parecer una serie de trampillas, no es así como funcionan la vida o Dios. Irse a la cama y levantarse por la mañana, no importa cómo nos sintamos por dentro, es un ritmo de túnel. Lo mismo ocurre con las dificultades y el dolor. Entramos por un extremo y salimos por el otro. Por gracia, el Señor nos da esperanza en la oscuridad y nos promete la luz de la alegría cada día que sale el sol.

Próximos pasos   

Desenredar la tensión entre lo que sientes y lo que Dios dice que es verdad forma parte de la vida. Hoy, llama o reúnete con alguien que conozca tus dificultades y luchas. Hablen juntos del Salmo 30:4-5 y pídele a Dios que te sorprenda con esperanza hoy y alegría mañana por la mañana.

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