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Un poco sobre mis calificaciones para escribir esto: Soy un pecador; he rezado y sigo rezando una gran oración para aceptar a Jesús, y moriré y estaré frente a Dios después de ir de la Tierra a mi hogar en el Cielo. Nuestra entrada al Cielo se basa en nuestra aceptación de Jesús como nuestro Señor y Salvador personal.

¿Te preguntas cómo declarar tu vida a Jesús? Aquí tienes una gran oración para aceptar a Jesús, basada en el versículo bíblico Juan 3:16:

Padre, sé que peco y que no puedo salvarme a mí mismo. Gracias por amarme lo suficiente como para enviar a Jesús, que nunca pecó, a tomar mi lugar en la cruz para que yo pueda ser perdonado y ganar la eternidad en el Cielo. Creo en Jesús, en sus palabras y en sus consejos, tal como están recogidos en la Biblia. Te entrego mi día, Señor. Me comprometo a seguirte hoy y todos los días hasta que vea tu rostro en el Cielo. En el nombre de Jesús, te lo ruego. Amén.

Como estoy en este camino con Jesús, hoy he decidido rezar esta oración cada mañana. Mi relación con Jesús es un regalo que puedo reabrir y con el que puedo volver a comprometerme cada día. Tú también puedes rezar esta gran oración para aceptar a Jesús todos los días.

Hace unos 45 años, quise unirme a nuestra iglesia como miembro oficial. En aquella época, parte del proceso consistía en reunirse con un anciano (un líder espiritual de la iglesia) para una especie de entrevista en la que uno explicaba su testimonio cristiano. Esto es lo que recuerdo:

Anciano: Dime cómo te convertiste en cristiano.

Yo : Crecí en la iglesia, y una noche, de niño, no podía dormir porque tenía miedo de que un ladrón entrara en mi habitación. Había oído que si aceptaba a Jesús, Él viviría siempre dentro de mí y me ayudaría. Así que le pedí a Jesús que entrara en mi corazón.

Anciano: No estoy escuchando algo que es importante en la aceptación de Jesús como su Salvador.

Yo: Hmm, bueno, sé que creí en Él si es eso a lo que quieres llegar.

Anciano: Como parte de tu creencia, ¿te diste cuenta de que eras un pecador y necesitabas que Jesús fuera un sacrificio por tu pecado?

Yo: Para ser honesto, en 3er grado no entendía por qué Jesús tenía que morir; eso vino mucho después. En el campamento de la iglesia, cada uno tenía un palo que representaba nuestros pecados. Podíamos arrojar nuestros palitos al fuego si creíamos y aceptábamos que Jesús había muerto por nuestros pecados. Mi pecado desapareció en las llamas esa noche. Solo pude llorar y agradecerle por perdonarme.

Vi el alivio en el rostro de la anciana; sabía que yo entendía el mensaje del Evangelio. A medida que continúo creciendo en conocimiento, desarrollo una mayor comprensión de Dios y de lo que Él enseñó a través de Sus palabras en la Biblia. 

Por un momento, leamos el versículo en el que basé la gran oración para aceptar a Jesús:

Juan 3:16

Porque tanto amó Dios al mundo que le dio a su Hijo unigénito, para que todo el que crea en Él 

no perecerá, sino que tendrá vida eterna.

Examinemos las palabras clave de este pasaje. Nos dice que Dios "amó al mundo". Tú eres una persona en este mundo; puedes insertar tu nombre donde dice "el mundo". 

Dios nos ama tanto que nos dio el gran regalo de su hijo Jesús -que vivió sin pecar- para que "creyéramos" en Él. Jesús también dijo que Él es "el camino, la verdad y la vida. Nadie viene al Padre sino por mí".(Juan 14:6). "Padre" se refiere a Dios, nuestro Padre Celestial.

¿Qué significa creer en el contexto de Juan 3:16? En el Nuevo Testamento -la parte de la Biblia que relata la vida de Jesús- la palabra griega para creer es pisteuo, que significa estar convencido de algo. Significa que cada uno de nosotros debe estar convencido de que Jesucristo murió en la cruz y volvió a la vida (el hecho de que Jesús volviera a la vida tres días después de su muerte es la razón por la que celebramos la Pascua) para que Dios pueda perdonar nuestros pecados personales . 

Suena tan sencillo, pero es tan difícil comprender lo profundo, vasto y desbordante que es el amor de Dios por nosotros. Gracias a los actos desinteresados de Jesús, todos somos llamados hijas e hijos de Dios.

En caso de que la necesites, aquí está de nuevo: una gran oración para aceptar a Jesús:

Padre, sé que peco y que no puedo salvarme a mí mismo. Gracias por amarme lo suficiente como para enviar a Jesús, que nunca pecó, a tomar mi lugar en la cruz para que yo pueda ser perdonado y ganar la eternidad en el Cielo. Creo en Jesús, en sus palabras y en sus consejos, tal como están registrados en la Biblia. Te entrego mi día Señor. Me comprometo a seguirte hoy y todos los días hasta que vea tu rostro en el Cielo. Te lo ruego en el nombre de Jesús. Amén.

Él es mío y yo soy suya. Es lo que soy. (Gracias, Ben Fuller, por esta increíble canción, "Who I Am").

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