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Así que, en todo, haced a los demás lo que queráis que os hagan a vosotros, pues esto resume la Ley y los Profetas. Entrad por la puerta estrecha. Porque ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos entran por ella. Pero pequeña es la puerta y estrecho el camino que lleva a la vida, y sólo unos pocos la encuentran. 

Mateo 7:12-14

Este año es mi tercer verano viviendo en la Península Superior de Michigan en el Campamento Paraíso de Willow Creek. Como Pastor del Campamento de Padres, tengo un asiento en primera fila viendo a padres e hijos experimentar la vida al máximo en un entorno remoto de retiro uno-a-uno. Desde 1991, hemos proporcionado un espacio para que más de 15.000 padres se desconecten y se reajusten, para que se recarguen espiritual y relacionalmente con Dios, con sus hijos y con otros padres. Lo sorprendente es la cantidad de veces que oigo a los padres decir: "No estaba seguro de esto, pero ahora está bloqueado en mi calendario cada año. Ahora se lo cuento a todos los padres que conozco".

Prometo que el devocional de hoy no es una promoción del Campamento de Padres. Es sólo un paralelismo obvio con el resumen de Jesús del Sermón de la Montaña. Las masas en la colina escuchaban atentamente mientras Cristo reformulaba la verdad de Dios y su aplicación. La gente rechazaba o creía las enseñanzas del nuevo rabino, pero todos seguían sus pasos espiritual y prácticamente. Jesús lanzó una amplia red sobre el tipo de vida que es mejor, y la multitud quería más. Luego, en Mateo 7:12-14, aclara que su mensaje no será encontrado ni recibido por todos. Es decir, no todos se desenchufarán y se reiniciarán del mundo para vivir como ciudadanos del reino de Dios.

El único camino al Campamento Paraíso es por una carretera estrecha, pero una vez allí, los límites se ensanchan hacia la exploración y el disfrute sin fin. En el Campamento de Padres, los padres llegan con la necesidad de escuchar la Regla de Oro, pero rápidamente se pasa de "trata a los demás como quieres que te traten" a "crezcamos en el amor a Dios y a los demás mientras seguimos juntos a Jesús". No todo el mundo responderá favorablemente al segundo acto, pero para los que lo hacen, hay mucha libertad, alegría y vida por vivir en el campamento y en casa.

La siempre creciente reunión de Jesús en el Monte de los Olivos y la constante afluencia de nuevos campistas del Campamento Paraíso tienen algo en común: los participantes no tienen ni idea de que están en un camino destructivo hasta que alguien se lo indica. El "camino ancho" es dejarse atrapar por la multitud. El "camino estrecho" consiste en aferrarse a lo mejor de Dios y no dar marcha atrás. Cuando hacemos esto último, llegamos a experimentar una vida cada vez más amplia que sólo el Señor puede dar y guiar. "Ancho > Estrecho > Ancho" es la invitación de Jesús a unirnos a Él momento a momento, día a día, para siempre.

Próximos pasos 

¿Cuál es tu experiencia "Ancho > Estrecho > Ancho" en tu relación con Jesús? ¿Cómo has empezado a experimentar la vida en plenitud al otro lado de la confianza en Cristo, y a quién quiere Dios que se lo cuentes?

Profundizar

Coge de nuevo ese impreso o tu Biblia. Hoy, marca las fases de transición que veas en el texto y luego dedica unos minutos a resumir el capítulo en unas pocas frases.