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Todo lo relacionado con ese primer año después de que perdiéramos a nuestro hijo menor, Phil, a causa del cáncer, estaba cargado de esfuerzo; nuestros primeros cumpleaños sin él, su primer cumpleaños y el primer Día de Acción de Gracias. Apenas podía levantarme de la cama, y mucho menos planear cualquiera de estos eventos que solían traer tanta calidez, risas y alegría a nuestro hogar. Sin embargo, aquí estaba la Navidad mirándonos fijamente, y no podíamos evitarla. Como nos habían recordado en el taller de Reconstrucción que acabábamos de terminar, la única manera de salir de esta celebración era pasar por ella.

Me senté en mi silla de tranquilidad, que se había convertido en mi silla de duelo, y le pedí a Dios que su corazón de compasión me cubriera y guiara. Me dio permiso para llorar, como seguramente había hecho cuando murió su hijo, así que... lloré. Ecos de Navidades pasadas se arremolinaron a mi alrededor, y mientras lloraba reconocí las múltiples capas de pérdida que la muerte de Phil nos había traído. No sólo perdimos a Phil; perdimos al niño cuyo trabajo era poner el ángel en la copa del árbol de Navidad... Lloré intencionadamente esa pérdida. Perdimos al niño que hacía su receta de guacamole para nuestra cena de Navidad... Lloré intencionadamente esa pérdida. Perdimos al niño que leía la historia de Navidad de Lucas 2... Lloré intencionadamente esa pérdida. Perdimos al niño que se reía con desenfreno de las pistas que Lance (su padre) creaba y que le llevaban a su regalo de Navidad... Me dolió mucho esa pérdida. 

Para una mujer a la que sus hijos llamaban "alegremente estoica", estaba muy cansada del dolor. Pero, como se nos recordó en Rebuild, tratar de eludir el dolor sólo conduce a más dolor en el camino. Con un suspiro, saqué el plan de estudios de Rebuild y hojeé su contenido. De todas las herramientas que Rebuild nos había dado para navegar por nuestro dolor, busqué una herramienta que pudiera utilizar para ayudarnos a afrontar esta primera Navidad sin Phil.

Acababa de utilizar una de las herramientas de mi silla de duelo, mientras nombraba y lloraba las capas de pérdida debidas a la muerte de Phil, y ese duelo había asentado mi alma lo suficiente como para mirar hacia el siguiente paso. Esta vez, elegí la herramienta titulada "Estar abierta a los desvíos". Mi hija se unió a mí, y hablamos sobre cómo ajustar las tradiciones que habíamos disfrutado durante los 28 años que tuvimos a Phil. Lloramos durante nuestra discusión, decidiendo que no estábamos preparados para adquirir nuevas tradiciones todavía, y determinamos las actividades que debíamos evitar hacer simplemente porque nos inspirarían demasiado dolor. Esto nos llevó a reconocer lo que podíamos seguir haciendo, sabiendo que se derramarían lágrimas al hacer esas cosas, pero también sabiendo que eran cosas que definían el día de Navidad para los cinco miembros de nuestra familia. Aunque no está claro, la Biblia parece indicar que hay momentos en los que a los que están en el Cielo se les da un vistazo de lo que ocurre en la tierra*, así que elegimos tradiciones que nos trajeran a todos un rayo de alegría en un día que sabíamos que sería duro para los cuatro que aún caminábamos por la tierra. *Ver Hebreos 12:1, Lucas 9:30-31, Lucas 15:10

Este año, nos enfrentamos a la tercera Navidad sin Phil. La conversación, todavía mezclada con el dolor, ha comenzado sobre cómo debemos pasar el día. La muerte de Phil nos rompió; no hay duda de ello. Todos somos personas muy diferentes a las que éramos antes. Han sido dos años y medio turbulentos llenos de trabajo de duelo intencionado, de lucha con Dios y, a veces, de lucha entre nosotros. Pero la honestidad, la humildad y la autenticidad que han nacido a través de todo ello están sentando una base diferente mientras reconstruimos el regalo de la familia que Dios ha confiado a las piezas rotas en las que nos hemos convertido. Estoy verdaderamente agradecido y me uno al coro de miles de millones de seguidores de Cristo, tanto vivos como muertos, que afirman la alegría de la resurrección, sólo posible gracias al nacimiento de Jesús.

La próxima sesión de Rebuild comienza el 1 de marzo de 2023. Visite willowcreek.org/rebuild a principios de 2023 para obtener más información.

Para saber más sobre cómo la gente del Cielo puede tener conocimiento de lo que ocurre en la Tierra, consulte este artículo: https://www.epm.org/blog/2021/Jul/19/loved-ones-heaven-see

Leer a continuación: No tan Feliz: Navidad con depresión.

Para conocer más formas prácticas de afrontar los problemas de salud mental, y las historias de otras personas que también han pasado por ello, consulte aquí nuestra lista completa de recursos.

¿Tienes curiosidad por saber qué piensa Dios sobre la salud mental? Vea el artículo de un pastor del campus de Willow Creek y profesor de teología.